Usted está aquí

La Habana,- Avances y desafíos en el abordaje y respuesta social ante el impacto de la violencia de género, prostitución, turismo sexual y trata de personas, a nivel global, regional y nacional, centraron los debates del II Simposio Internacional “Violencia de género, prostitución, turismo sexual y trata de personas”, celebrado en la capital de Cuba del 23 al 25 de enero.

Este encuentro muestra “una enorme visión e inteligencia para la identificación de desafíos globales y su enfrentamiento con la voluntad de darse la capacidad para comprenderlos y actuar”, aseguró la Coordinadora Residente del Sistema de Naciones Unidas (SNU) en Cuba Myrta Kaulard, en la clausura de la cita convocada por el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) con el apoyo del UNFPA, Fondo de Población de las Naciones Unidas.

 

 “Todo los temas debatidos aquí constituyen aspectos fundamentales para alcanzar el desarrollo sostenible”, aseguró Kaulard quién compartió fragmentos de la resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas “Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”, aprobada el 25 de septiembre de 2015 por 193 Estados miembros de la ONU.

Tras subrayar la disposición del SNU de seguir acompañando los esfuerzos para el intercambio de conocimientos y experiencias en estos y otros temas, la Coordinadora Residente resaltó la importancia de trabajar de manera articulada en el cambio cultural necesario que permita superar el sistema patriarcal dominante en el mundo actual.

Como parte de esta colaboración la Asesora Regional de Género y Juventud del UNFPA, Neus Bernabeu, presentó desafíos y recomendaciones para el enfrentamiento de la violencia contra las mujeres y las niñas, identificados a nivel regional por agencias del SNU en el marco de la Campaña ÚNETE para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas.

Publicaciones del SNU en Cuba como la Memoria de la Campaña ÚNETE 2011-2015, la Agenda de las Mujeres Cuba 2017, un tríptico sobre el ODS 5 “Lograr la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de todas las mujeres y las niñas” y el plegable “Yo digo No”, fueron entregados a todas las personas participantes.

RESPUESTAS INTEGRALES

 

La necesidad de avanzar en los posicionamientos teóricos a partir de realidades cambiantes y signadas por la globalización, la definición de políticas y el enfrentamiento legal, el acceso a los datos y la información sobre tendencias e incidencias con indicadores comparables a nivel regional y global, centraron los debates en los temas principales del evento.

Ante unos 80 especialistas y activistas de Alemania, Canadá, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Estados Unidos, Francia, México, Nicaragua y Suecia, la directora del CENESEX Mariela Castro Espín valoró los resultados de la experiencia de Suecia de penalizar al cliente y proteger a la persona sometida a la prostitución.

En una conferencia magistral sobre esta problemática en Cuba, Rosa Campoalegre se pronunció a favor de políticas de cuidado que permitan proteger y acompañar a las personas en situación de prostitución. "No debemos criminalizar esas conductas, ni asociarlas a la justicia penal", aseguró la especialista del Centro de Investigaciones Psicológicas y Sociológicas.

Por su parte, Yoandrys González García, jefe de Cooperación Operacional Internacional de la Dirección General de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), aseguró que Cuba mantiene una política de cero tolerancia ante fenómenos como la trata de personas asociadas a la explotación sexual, laboral y de otra índole, incluida la explotación sexual de menores.

González García hizo referencia a la publicación en 2016 del tercer Informe de Cuba sobre el enfrentamiento jurídico-penal a la trata de personas  y otros delitos relacionados con la explotación, o con el abuso sexual y valoró la cooperación internacional para evitar la entrada al país de personas fichadas por antecedentes en este tipo de delito.

 

Entre los desafíos para el país, el experto de la PNR resaltó la necesidad de informar a la población sobre estas problemáticas y sus manifestaciones para avanzar en la prevención y la denuncia, así como  contrarrestar la baja percepción de riesgo existente a nivel nacional ante la trata con fines de explotación sexual y vinculada a fenómenos como la migración.

Especialistas nacionales abogaron por garantizar la perspectiva de género en la aplicación de las leyes vigentes, en la atención a las mujeres víctimas y sobrevivientes de violencia y también en la atención a aquellas mujeres convertidas en victimarias como resultado de haber estado sometidas a maltratos intensos y sostenidos en el tiempo.

En este camino, el jefe del Grupo Jurídico del CENESEX Manuel Vázquez Seijido colocó la mirada en la violencia que viven las personas por su orientación sexual e identidad de género y la necesaria visualización en los debates de las problemáticas específicas de grupos especialmente vulnerables e invisibilizados, como las mujeres lesbianas y las personas trans.

BUENAS PRÁCTICAS

Como un importante ejemplo del impacto del proyecto de capacitación en Género y Derecho de la Unión Nacional de Juristas de Cuba (UNJC), fue valorada la presentación por Yamila González Ferrer de una sentencia emitida el 25 de noviembre del 2016 por una jueza del Tribunal Supremo Popular, que entre otros argumentos menciona la Convención de las Naciones Unidas para la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW).

“Tenemos que hacer justicia y proteger a las víctimas con las leyes que tenemos”, aseguró la profesora de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana Arlín Pérez Duarte quien, junto a su colega González Ferrer, abogó por interpretaciones inteligentes y con enfoque de género de las normas legales vigentes en el país.

Entre las buenas prácticas compartidas se encuentran el trabajo del CENESEX con personas trans que practican el sexo transaccional en Cuba, varias experiencias del Centro “Oscar Arnulfo Romero” en la atención a la violencia y el trabajo con grupos de hombres, el documental del Proyecto Palomas “Estoy viva…lo voy a contar” y una intervención educativa de la Universidad de Ciencias Pedagógicas Enrique José Varona  con más de 200 estudiantes de pedagogía.

La prevención de la violencia desde el espacio escolar y la promoción de práctica educativas que permitan desmontar los estereotipos de género desde la infancia, ocupó la última sesión de trabajo que contó con la participación de la ministra de Educación Ena Elsa Velázquez Cobiella. Se trata de “una labor de todas y todos, cada día”, enfatizó la alta funcionaria.