Medir el impacto del trabajo, evaluar correctamente y utilizar los aprendizajes para mejorar el trabajo futuro, ajustar y estudiar las características del contexto, así como pensar las acciones con el protagonismo de la población beneficiaria son algunas de las certezas que han dejado las diferentes actividades realizadas recientemente en Cuba como parte de la implementación de los estándares de calidad de los servicios de salud sexual y reproductiva (SSR) para adolescentes.
En reuniones técnicas, espacios de capacitación y talleres creativos se fortalecen capacidades y consolidan herramientas tanto en el personal de la salud, como en profesionales de otros ámbitos, incluidos grupos de jóvenes que aportan con su labor de promoción.
“No solo debemos garantizar que existan los servicios, sino que se utilicen y garanticen calidad”, expresó Alma Virginia Camacho-Hübner, asesora técnica regional en SSR en la Oficina Regional para América Latina y el Caribe del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA-LACRO), quien realizó una visita de trabajo a Cuba del 25 al 28 de noviembre.
De igual modo subrayó que “se debe garantizar que las y los adolescentes se empoderen y tomen decisiones libres e informadas”.
Entre las actividades realizadas por Camacho-Hübner en La Habana figuró su acompañamiento al taller de capacitación “Evaluación de la calidad de los servicios de salud para adolescentes, con énfasis en salud sexual y reproductiva (SSR)”, efectuado del 25 al 27 de noviembre.
El espacio formativo incluyó la revisión de instrumentos, adaptación cultural, prueba de campo de las herramientas, recogida de datos y análisis de los resultados, así como trazar una hoja de ruta para realizar un pilotaje de medición de estándares de calidad, con énfasis en salud sexual y reproductiva.
Según afirmó Camacho-Hübner, luego de estas sesiones de trabajo el UNFPA en la nación caribeña y las instituciones aliadas “van a tener la posibilidad de mostrar resultados en el tema e integrarse a un paquete regional que va a alimentar un aprendizaje en un contexto global”.
La implementación en Cuba de estándares de calidad para servicios de SSR dirigidos a adolescentes es una iniciativa liderada por el Ministerio de Salud Pública (Minsap) y la oficina del UNFPA en la Isla, con el apoyo del programa conjunto UBRAF-ONUSIDA.
Las acciones realizadas parten de la premisa de que aun con información, servicios de planificación familiar y acceso a la anticoncepción disponibles, la tasa de fecundidad adolescente en el país no disminuye, e incluso, entre 2008 y 2018 se incrementó de 49,2 a 54 nacimientos por cada 1,000 mujeres de 15 a 19 años, según datos publicados en el Anuario Demográfico.
Esa es una de las realidades que se pretende transformar, y que coincide con el panorama de América Latina, región con la segunda tasa específica de fecundidad adolescente más alta del mundo, y la única región con una tendencia en aumento en el número de embarazos en adolescentes de 10 a 14 años.
Respecto con las capacitaciones, la Dra. Marisol Alfonso de Armas, representante auxiliar del UNFPA en Cuba, explicó que “han sido vitales para fortalecer las capacidades nacionales desde que inició el proyecto hace más de tres años”.
“Ahora el Minsap tiene un grupo de profesionales con formación y herramientas suficientes que ser protagonistas en todas las fases, incluida la ampliación de la iniciativa hacia otros territorios en el futuro”, acotó.
De igual modo, Alfonso remarcó que, si bien “en ocasiones aspiramos a que los procesos ocurran de manera rápida, lo importante es que se desarrollen con sistematicidad, se puedan documentar y sean iniciativas sólidas”.
El recorrido
La implementación en Cuba de estándares de calidad para servicios de SSR dirigidos a adolescentes ha comenzado en Cuba por los municipios de Buey Arriba, en la oriental provincia de Granma, Cumanayagua, en Cienfuegos, San Miguel del Padrón, en La Habana y Las Tunas, en la homónima provincia.
De forma simultánea a los procesos de capacitación se elaboraron, de forma participativa, materiales comunicativos que se encuentran en cada unidad de salud y otros espacios frecuentados por ese grupo de edad.
La serie, en formato de pancartas, contiene información sobre los derechos sexuales y reproductivos de los adolescentes, los estándares de calidad para los servicios de SSR dirigidos a ese grupo de edad y aprobados para Cuba, y los servicios de esta índole disponibles en cada territorio.
Talleres, reuniones diversas, espacios compartidos en los que participaron también autoridades de gobierno y representantes de otros sectores, en los cuales se identificaron barreras culturales, creencias, mitos y maneras de establecer los servicios que han afectado el acceso de muchachas y muchachos de estas edades.
Además, de conjunto con el Departamento Nacional del Programa de Atención Materno Infantil y la Unidad de Promoción de Salud y Prevención de Enfermedades, y en atención a la demanda de adolescentes, se trabaja en la ampliación y focalización de una consejería telefónica sobre SSR.
Minsap agradece al UNFPA
Roberto Álvarez Fumero, jefe del Departamento Materno Infantil del Minsap agradeció la confianza del UNFPA en Cuba y de la oficina regional por “apostar a la fortaleza del sistema de salud en el país para implementar los estándares, que tienen necesariamente que conllevar a mejorar la calidad de los servicios de salud que se brindan a la población adolescente”.
El directivo detalló que el recorrido incluyó primero conocer qué eran los estándares, después el acompañamiento de Alma Virginia Camacho-Hübner en las reuniones con expertos y expertas para elaborarlos ajustados al contexto cubano y además la selección de los territorios que iniciarían este proyecto”.
Según asegura Álvarez Fumero, “la asesoría ha sido importante y en todo momento, lo que nos permite ir ahora un paso más adelante perfeccionar los modos para medir el impacto real de todo el proceso y comparar con los resultados de otras naciones en América Latina y el Caribe”.
Las capacitaciones recientes contaron con la presencia en La Habana de la doctora Lorena Ramírez, directora del Centro de Salud Integral del Adolescente Rucahueche y profesora asistente de la Escuela Obstetricia y Puericultura, en la Universidad de Santiago de Chile (Usach), así como Nicolás Vega, profesor Escuela de Medicina de la propia Usach.
El proceso continúa, las alianzas se fortalecen, las acciones se contextualizan y tiene en cuenta las necesidades de la población adolescente, para la cual se trabaja en función de que puedan acceder a servicios de salud de calidad, incluida la sexual y reproductiva, como paso imprescindible en el logro de la agenda de desarrollo humano global y nacional. (Jesus Muñoz/UNFPA en Cuba)