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El Pilar 2 del Plan de Respuesta Socioeconómica Inmediata a la COVID-19 del Sistema de Naciones Unidas en Cuba está dirigido a apoyar la continuidad y el perfeccionamiento de servicios básicos, así como de los sistemas de protección social y cuidado, para satisfacer con calidad las necesidades de los grupos en condiciones de mayor vulnerabilidad.

En este pilar se han concentrado importantes acciones del UNFPA en Cuba, en coherencia con tres de las áreas estratégicas de su Programa de País para el período 2020-2024: Igualdad de género y empoderamiento de la mujer, Adolescentes y jóvenes, y Dinámica de la población.

Una línea de trabajo fundamental del UNFPA durante el año 2020 fue el trabajo con sus contrapartes para el desarrollo de estrategias dirigidas a la articulación de una respuesta para la atención y prevención de la violencia basada en género (VBG).

Poco después del inicio del aislamiento físico en Cuba, el UNFPA trabajó en el mapeo de los servicios disponibles para la atención a víctimas y/o sobrevivientes de la VBG, junto a varias instituciones y áreas clave del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), la Unión Nacional de Juristas de Cuba (UNJC) y el Centro Oscar Arnulfo Romero (OAR).

A partir de este trabajo, se elaboraron mensajes informativos y educativos para redes sociales, encaminados a la prevención de la VBG en familias diversas, con los cuales fueron alcanzadas 6824 personas.

Más adelante, el UNFPA se integró al Equipo Asesor de la Federación de Mujeres Cubanas para la prevención y atención a la VBG, en la labor de abogacía y construcción de una respuesta articulada a la VBG que incluyera la prestación de servicios básicos remotos a víctimas y/o sobrevivientes.

 

Durante este periodo, el UNFPA apoyó técnica y financieramente el trabajo del Equipo Asesor de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en temas de igualdad de género y para la atención a la VBG.

 

Como parte de este esfuerzo, se elaboró un mapa de los servicios telefónicos que brindan las instituciones de salud, la fiscalía, la policía y el sector social en los 168 municipios del país. Este mapa se distribuye a todo el personal que brinda servicios de prevención y atención a la VBG, a las víctimas o sobrevivientes, y a las redes de apoyo vecinales. La finalidad de este producto es dar a conocer los recursos disponibles para la atención a la VBG, así como facilitar la derivación de casos de VBG a servicios sociales, jurídico-policiales y de salud esenciales.

Junto a este mapa, se confeccionó la “Guía básica para personal que brinda servicios telefónicos de atención a la violencia basada en género”, que ofrece un grupo de recursos teóricos, metodológicos y prácticos a los equipos que se desempeñan en la atención telefónica de diferentes formas de VBG.

Estos materiales apoyan el trabajo de las operadoras y los operadores que prestan servicios telefónicos en diferentes instituciones y organismos vinculados a la atención de la VBG

Igualmente, se preparó un programa de capacitación compuesto por cinco módulos, destinado a funcionarias y funcionarios de todas las instituciones encargadas de atender los casos de VBG, así como al personal que brinda servicios telefónicos para este fin.  

Al mismo tiempo, se trabaja en la propuesta de Estrategia Nacional para la Prevención y Atención a la VBG, y ya fue elaborada una Propuesta de Guía Metodológica para la elaboración de Protocolos de Actuación de todos los Organismos, Instituciones y Organizaciones de la Sociedad Civil.

Además, el UNFPA propició alianzas entre el Grupo Asesor de la FMC y el equipo de orientadoras y orientadores de los Psicogrupos de WhatsApp de la Sociedad Cubana de Psicología, para la capacitación de las personas que brindan este servicio remoto en la identificación, detección, atención, registro y derivación oportuna a víctimas y/o sobrevivientes de la VBG.

En su trabajo con personas adolescentes y jóvenes durante estos meses marcados por la pandemia de COVID-19, una de las principales acciones llevadas a cabo por el UNFPA para el beneficio de adolescentes y jóvenes ha sido la elaboración de mensajes, de acuerdo con su edad, que potencian el autocuidado, la protección de la salud mental y sexual, la corresponsabilidad familiar, la promoción de resiliencia y la participación en la respuesta a la emergencia sanitaria. En su elaboración se incluyeron temas clave de la EIS como son: el fomento de las relaciones interpersonales basadas en la solidaridad y en el respeto a la igualdad de género y los derechos.

Estos mensajes, elaborados de conjunto con el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), la Unidad de Promoción de Salud y Prevención de Enfermedades del Ministerio de Salud Pública (Prosalud), se compartieron en redes sociales y se llevaron al formato impreso. En su versión digital, alcanzaron a 12 641 personas, mientras que en formato impreso se distribuyeron 5 000 ejemplares entre instituciones de salud y las comunidades más afectadas por la pandemia en La Habana.

El UNFPA también ha apoyado al Ministerio de Educación para asegurar que el retorno a la escuela ocurra de manera segura. A partir de un diagnóstico de necesidades, se ha propuesto un conjunto de mensajes educativos que formarán parte de una campaña comunicacional destinada a dos públicos meta: docentes y población escolar adolescente, la cual se desarrollará en instituciones educativas y a través de los medios de comunicación masiva y redes sociales. Para esto se ha prestado especial atención a las necesidades relacionadas con la salud mental de estudiantes y docentes. También se ha puesto el foco en la promoción de la capacidad de resiliencia, así como de un entorno familiar y escolar libre de violencias, en particular de la VBG. Junto a estos mensajes educativos, el UNFPA donará 1000 termómetros infrarrojos que llegarán al país en los próximos días y serán distribuidos en escuelas internas.  

 

Para la elaboración de los mensajes educativos, se realizaron talleres en los cuales participaron estudiantes de nivel preuniversitario

 

Por otra parte, en este periodo, 24 jóvenes de varias provincias del país fueron capacitados en temas de población, juventud, salud sexual y reproductiva, derechos sexuales y reproductivos y prevención de la VBG, durante el Campamento Juvenil Virtual “Géneros y derechos sexuales: Miradas al contexto cubano actual”. Como parte del Campamento, organizado de conjunto con el Centro de Estudios sobre la Juventud, sus participantes elaboraron proyectos para transformar normas e imaginarios sociales que perpetúan las desigualdades de género y la VBG. Estos proyectos serán implementados durante el primer trimestre de 2021.

La incorporación de la dinámica demográfica a todas las acciones de respuesta inmediata a la COVID-19 y de recuperación socioeconómica ante esta crisis sanitaria ha sido otra de las contribuciones del UNFPA en estos meses.

Para ello, se apoya la labor del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de La Habana (CEDEM) en la generación de evidencias para la toma de decisiones sobre la situación epidemiológica del país y la demanda de cuidados de grupos en condiciones de vulnerabilidad.

Pocas semanas después de que se reportaran los primeros casos de contagio por el nuevo coronavirus en el país, el CEDEM activó el Observatorio Sociodemográfico Nacional Temporal para la atención a la COVID-19, con base en el propio centro, en el Centro de Estudios de Población y Desarrollo de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (CEPDE-ONEI), y en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO). El trabajo de este observatorio nacional se articuló con el de los Grupos de Estudios Sociodemográficos Provinciales y Observatorios Demográficos a nivel territorial, los cuales constituyen una herramienta clave para la implementación de la política de atención de la dinámica demográfica en el país y monitorear el impacto de la COVID-19 a nivel local.

Estos Observatorios Demográficos se constituyeron a partir de la necesidad de conocer las características sociodemográficas de la población, el cruzamiento de sus variables y el trazado de estrategias que la tengan en cuenta desde el punto de vista epidemiológico, económico, social y territorial. Entre sus objetivos está evaluar comportamientos ante la epidemia, valorar la efectividad de cada medida de enfrentamiento y sacar las lecciones que permitan la continuación del diseño actual del enfrentamiento a la COVID-19 y el trazado para el futuro.

Además, se produjo, en coordinación con la Oficina de la Coordinadora Residente, un spot dirigido a personas adultas mayores y sus familiares para fomentar la puesta en práctica de medidas de cuidado que protejan a este grupo poblacional del contagio. El spot fue trasmitido a través de la televisión nacional en horario estelar y en las redes sociales del UNFPA alcanzó a casi 900 personas.

Otra de las contribuciones de UNFPA para proteger a personas en condiciones de vulnerabilidad fue la realización de un mapeo sistemático de las necesidades y las estrategias de protección de las personas que viven con VIH (PVV) y poblaciones clave como hombres que tienen sexo con otros hombres, personas trans y personas que practican sexo transaccional. A partir de este trabajo, se elaboraron materiales educativos y promocionales dedicados a PVV en formato impreso y digital. Con los mensajes en formato impreso se alcanzó a 1 500 transexuales femeninas de todo el país, así como 2 500 PVV en La Habana y 1 000 en Artemisa; mientras que los mensajes publicados en las redes sociales llegaron a 14 971 personas.

Todas las estrategias contenidas el Programa de País 2020-2024 y en el Plan de Respuesta Socioeconómica Inmediata del Sistema de Naciones Unidas en Cuba a la COVID-19 se basan en la premisa de no dejar a nadie atrás. Las acciones que se han llevado a cabo para mitigar los efectos socioeconómicos de esta crisis buscan no reproducir vulnerabilidades preexistentes, atender las necesidades diferenciadas de grupos en condiciones de vulnerabilidad, y considerar la ciencia y los procesos de digitalización e informatización como elementos dinamizadores. A su vez, se articulan con la implementación nacional de la Agenda 2030 y con las prioridades nacionales expresadas en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030.